La Cámara de Diputados comenzó el debate sobre la reforma constitucional que propone la extinción de siete órganos autónomos en el país. Esta discusión arrancó después de la comparecencia del Secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, quien presentó detalles del Presupuesto 2025 ante los legisladores, el cual fue entregado el viernes pasado.
El proyecto de reforma forma parte del llamado «Plan C» propuesto por el ex presidente Andrés Manuel López Obrador. La propuesta plantea la eliminación de organismos clave como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), encargado de medir la pobreza en el país. Además, también se busca disolver la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y el Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación.
La mayoría en la Cámara de Diputados ha expresado su intención de modificar el dictamen para crear un nuevo órgano descentralizado que concentre las funciones del IFT y la Cofece. Ricardo Monreal, coordinador de Morena, anunció la presentación de una reserva al dictamen, que se discutirá este miércoles, con el objetivo de asegurar que este nuevo organismo tenga independencia técnica, así como patrimonio y personalidad jurídica propios. Monreal destacó que la intención es que las decisiones en áreas de regulación, telecomunicaciones y monopolios no dependan del titular de la Secretaría de Economía, que según el dictamen actual, sería responsable de las facultades de la Cofece.
El debate comenzó con una moción suspensiva presentada por la diputada Anayeli Muñoz de Movimiento Ciudadano (MC), quien solicitó interrumpir la discusión, señalando que el dictamen no incluyó la opinión de los miembros de la actual Legislatura. Muñoz argumentó que la eliminación de estos organismos autónomos afectaría los contrapesos en el poder y socavaría los derechos humanos y los pilares democráticos. Sin embargo, la moción fue rechazada y la discusión continuó.