Claudia Sheinbaum Pardo asumió como la primera Presidenta de México para el periodo 2024-2030. La ceremonia se llevó a cabo en el Palacio Legislativo de San Lázaro, donde el presidente saliente, Andrés Manuel López Obrador, entregó la Banda Presidencial a Ifigenia Martínez, presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, quien posteriormente se la colocó a la nueva mandataria.
Sheinbaum rindió protesta ante el Congreso de la Unión, comprometiéndose a guardar la Constitución y desempeñar el cargo de manera leal y patriótica. Este hecho marca un hito en la historia del país, ya que se convierte en la primera mujer en ocupar la presidencia en 200 años de república. Su llegada a la presidencia también fue notable por ser la mandataria con mayor número de votos en la historia reciente, superando los 35 millones de sufragios.
Tras asumir el cargo, Sheinbaum ofreció su primer mensaje a la Nación, en el que exaltó la figura de López Obrador, calificándolo como uno de los líderes más importantes de la historia moderna de México. Posteriormente, una comisión de legisladores la acompañó al Palacio Nacional, donde tomó protesta a su Gabinete Legal y compartió una comida con invitados internacionales.
Entre los desafíos que enfrentará su administración se encuentran temas como la gobernabilidad, presiones económicas y la reorganización administrativa. Sheinbaum ha manifestado su intención de dar continuidad a los proyectos de su predecesor, con especial énfasis en el desarrollo de infraestructura ferroviaria, con la puesta en marcha de al menos ocho líneas de trenes de pasajeros.
En su discurso, también destacó el avance logrado en los últimos años, atribuyéndolo a lo que definió como el humanismo mexicano, un nuevo modelo de desarrollo basado en el amor al pueblo y la honestidad, en contraposición al régimen neoliberal del pasado.