Francisco, el pequeño de 6 años que había caído en coma luego de tomar una bebida energética, falleció este jueves, después de haber pasado 5 días internado en un hospital de Tamaulipas.
Esto, luego de que el pasado miércoles el personal de salud confirmara que “Panchito”, como su familia le decía de cariño, sufría de muerte cerebral, por lo cual fue desconectado a las máquinas que lo mantenían con vida.
Medios locales informaron que los médicos ya habían dado este pronóstico a Jessica Jazmín Cervantes, la madre del menor, ya que Francisco no reaccionaba; sin embargo, se negaba a retirar el apoyo vital.
No obstante, la mañana de este jueves el padrastro de “Panchito” confirmó que el pequeño murió en el hospital Alfredo Pumarejo, donde estaba internado desde el pasado 16 de abril
NIÑO TOMÓ BEBIDA ENERGÉTICA Y QUEDÓ EN COMA.
Hoy desconectarán al pequeño Francisco Cristaldo por diez minutos para descartar su muerte cerebral
Se dio a conocer que un niño de 6 años, ingirió una bebida de nombre “Monster”, le provocó una intoxicación y quedó en coma pic.twitter.com/l0STLskiJc
— NotaJalisco (@NotaJalisco) April 20, 2022
El menor de 6 años fue ingresado al hospital, luego de que presentara malestares por tomar ‘Monster’, una bebida energética: “El Monster era de un primo de él, se le hizo fácil agarrar un vasito y pasó esto, pero le estamos pidiendo mucho a Dios”, comentó su abuela.
Al llegar, de acuerdo con su familia, los médicos les explicaron que podría haberse intoxicado tras tomar la bebida: “tomó un vaso de esa bebida por lo que se comenzó a sentir mal (…) en el camino empeoró, lo trajeron al hospital y los doctores dijeron que estaba intoxicado”, refirió su familia.
Además, agregaron que podría tener muerte cerebral; no obstante, necesitaban más estudios. Fue así que luego de 5 días internado, los médicos confirmaron el diagnóstico.
“Panchito” como le decía su familia de cariño será velado en su casa en la colonia Treviño zapata, y más tarde su cuerpo descansará en el panteón “Los Tomates”, señala el diario Info 7.
Familiares, conocidos y amigos acudieron a la despedida de este pequeño; con globos blancos y la frase “Vuela alto, Panchito” escrita en la parte trasera de un auto, acudieron en caravana hasta el cementerio donde darían el último adiós. Todos reunidos, soltaron globos blancos al cielo de manera simbólica para despedirlo.
