Moscú.- Rusia impulsa desde 2016 el Ilyushin 96-400, un avión cuatrimotor de 402 pasajeros que no tiene clientes ni tampoco se espera que pueda llegar a tenerlos. El proyecto ha llegado ahora a la fase final, con prototipo finalizándose, y podrá volar al principio del año que viene, con dos años de retraso sobre la idea inicial.
Pese a la falta de compradores, el proyecto sigue adelante por una cuestión de orgullo nacional, ya que Rusia no puede permitirse fracasar. El avión no es enteramente nuevo, pues ya existen modelos menos ambiciosos como el Ilyushin 96-300, que fue lanzado en 1988 y que naturalmente fue comprado por Aeroflot, pero ahora ni Aeroflot quiere saber nada del heredero.
La falta de compradores no es sorprendente, dado que es un avión que interesa políticamente a Rusia, cuyo Gobierno dijo que iba a invertir casi mil millones de dólares en el diseño del nuevo avión, más otro tanto para hacer la factoría.
A eso hay que añadir 40 mil millones para la compañía de leasing que se quedará con los aviones para después alquilarlo a los clientes imaginarios que aún no han aparecido. La fábrica está preparada para producir al menos dos aviones al año.
Para entender la viabilidad de este avión, hay que pensar que es cuatrimotor y que prácticamente ya no quedan aviones operativos de este tipo, una vez que el Airbus A340, mucho más eficiente que el Ilyushin, incluso en la versión que está siendo construida, ha sido totalmente retirado.
Tomado de Reportur.