Cdmx.- Karla Quintana Osuna, quien ocupó anteriormente el cargo de titular de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas en la Secretaría de Gobernación, confirmó el martes pasado que su dimisión del organismo se debió a la estrategia del gobierno federal de actualizar el registro de personas desaparecidas en lugar de abordar de manera efectiva el problema.
Durante su participación en el Seminario sobre Violencia y Paz del Colegio de México, Quintana, quien dejó su puesto en agosto de 2023, expresó que uno de los desacuerdos fundamentales con el gobierno federal radica en la iniciativa de la Secretaría del Bienestar de llevar a cabo un censo “casa por casa” de familiares de personas desaparecidas.
Destacó que este esfuerzo, realizado por los “servidores de la nación”, no estaba regulado ni supervisado por profesionales especializados en la búsqueda de personas desaparecidas.
“Este trabajo se realiza a través de una autoridad que no está autorizada por la ley para llevar a cabo labores de búsqueda. Son las comisiones y las fiscalías las que deben liderar estos procesos, y además, esta autoridad no cuenta con la capacitación necesaria para llevar a cabo este tipo de tareas”, enfatizó.
La exfuncionaria también cuestionó el manejo de los datos recopilados por la Secretaría del Bienestar, advirtiendo que la recopilación de información sin el tratamiento adecuado podría resultar en la revictimización de las personas afectadas y dificultar la investigación de casos en los que existan nombres similares.
Karla Quintana subrayó que, si bien hubo motivos de forma que influyeron en su renuncia a la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas, existieron motivos de fondo relacionados con la verdadera intención de la actualización del registro nacional, que, según ella, se centraba en mejorar la imagen del gobierno al reducir el número de personas desaparecidas.
“La intención es muy clara y lamentable: reducir la cifra de personas desaparecidas, principalmente en este gobierno, y también se dirige a los 23 gobiernos estatales liderados por el partido en el poder. Esto fue lo que me llevó a dimitir de la CNB, ya que discrepé tanto en la forma como en el propósito del censo”, concluyó.