Por : Norberto Emmerich
El próximo domingo 24 de enero, dentro de muy pocos días, Acción Nacional define quién será el candidato a gobernador o la candidata a gobernadora del partido para la gobernación del estado de Chihuahua. Maru Campos tiene al alcance de la mano la posibilidad de ser la candidata electa del PAN y comenzar a partir de allí la campaña electoral.
El propio Gustavo Madero lo ha dicho recientemente en un acto público: “hay que reconocer y agradecer el capital político, el liderazgo de Maru Campos. El trabajo que ha hecho aquí en el ayuntamiento con todo su equipo se conoce en todo Chihuahua y hoy no hay quien la pare, no hay quien la alcance, es una alcaldesa de primera que es muy querida en Chihuahua. A poco no. Y vamos todos unidos, todos juntos, porque estamos luchando por lo mismo”.
Son palabras textuales, entre los aplausos del público y su propia sonrisa complaciente. Mientras la vida política de Gustavo Madero ha transcurrido entre el partido y el Congreso sin experiencia en cargos públicos, Maru Campos es la alcaldesa de la capital del Estado, elegida reiteradamente como una de las mejores líderes municipales de todo el país.
Posiblemente la elección del domingo 24 se convierta en un hecho testimonial para Gustavo Madero. Es un candidato hábil para la política de pasillo que ha utilizado su alianza con el gobernador Javier Corral para acosar sin descanso y sin pruebas a Maru Campos. Pero no sabe del contacto personal, el carisma y el buen gobierno que caracterizan a Maru Campos, formada y experta en la administración pública y la búsqueda de consensos gobernables.
Ella no es buena para tiempos de Covid. Le gusta estar cerca de la gente, lanzarse en abrazos y saludos, transmitir entusiasmo. Sabe conseguir votos y sabe qué hacer con ellos a la hora de gobernar.
Sólo Maru puede ganarle a Morena, dicen sus seguidores. La elección del próximo gobernador de Chihuahua será entre Morena y el PAN, no hay más. Mientras en Morena importa la sigla y no el candidato, en el PAN la candidata lo es todo. Morena sabe que no gana solo, por eso busca aliados, algunos de los cuales son insostenibles. Cuando Maru Campos sea candidata electa, los interesados en aliarse al PAN vendrán por su propia cuenta.
En esta etapa de pre campaña la elección interna del PAN es el acontecimiento más importante de la política estatal. Es el único partido que tiene un candidato popular en Chihuahua. Sin embargo, la embestida contra Maru Campos es feroz, y quizás no se detenga después del 24. Por ahora toca esperar que en los pocos días que faltan hasta el domingo no se descarrile el proyecto.