Opinión.-
Pese a que la relación entre la gobernadora y el Gobierno Federal, podría decir que se ha llevado con mesura, y dando por entendido que a ninguna de las dos partes les sirve la confrontación, la diputada del PAN, Laura Contreras, piensa muy distinto.
Ahora la legisladora presentó una denuncia en contra del virrey, Juan Carlos Loera, bajo el argumento de que mediante un refrán, hizo alusión a comentarios misóginos en contra de la gobernadora.
Pero ¿Quién le dijo a Laura Contreras que metiera su cuchara? La denuncia no la puso ni la propia gobernadora, porque sabe que la relación es frágil y ahora lo último que necesita Chihuahua es una confrontación nueva con el presidente.
Pareciera que los diputados federales del PAN le sacan más ganancias a las diputas que al consenso, y ese podría ser el motivo por el que Laura Contreras metió las manos en donde nadie la llamó, aún y cuando en su distrito hay una serie de carencias y cosas que necesitan gestiones, Contreras prácticamente no ha hecho nada por su distrito, salió como todos los políticos, esos que nomás usa a los ciudadanos para sacarles el voto, pero después los dejan en el olvido…
