Las autoridades japonesas confirmaron que cuatro personas perdieron la vida este lunes como resultado del poderoso sismo que sacudió Japón, según informó la agencia Kyodo, citando a la prefectura de Ishikawa.
El terremoto, con una magnitud de 7.5, causó daños significativos y generó tsunamis con olas de más de un metro de altura en algunas áreas, lo que llevó a las autoridades a ordenar la evacuación de la población.
Inicialmente, la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) emitió una alerta de tsunami importante, siendo la primera desde el terremoto y tsunami de marzo de 2011 que afectó al noreste de Japón y cobró la vida de casi 20 mil personas. Esta alerta se emitió para la prefectura de Ishikawa, pero posteriormente se redujo y finalmente se canceló.
El terremoto generó olas de aproximadamente un metro a lo largo de la costa occidental de Japón y en la vecina Corea del Sur. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, este sismo fue el más fuerte registrado en la región en más de cuatro décadas.
El impacto del terremoto causó la destrucción de viviendas, incendios y llevó al despliegue del personal del Ejército para participar en las operaciones de rescate, según informó el portavoz del Gobierno, Yoshimasa Hayashi. Un anciano fue declarado muerto después de que un edificio colapsara en la ciudad de Shika, en Ishikawa.
Además, alrededor de 30 mil hogares se quedaron sin electricidad, y se estima que casi 100 mil personas fueron evacuadas de diferentes prefecturas.