Al sentir el estruendo personal de la estancia infantil y vecinos alertaron a las autoridades.
Policías y bomberos acudieron al lugar y desalojaron un total de 40 niños y sus cuidadoras refugiándose en una vivienda de enfrente hasta que pasara el incidente.
En tanto los bomberos inspeccionaban el accidente dentro de la bodega, checando instalaciones de gas y energía eléctrica para garantizar la seguridad de los mismos y sus vecinos. Finalmente, el jefe a cargo de indicó que no había peligro y ninguna persona resultó con lesiones.