Por: Esteban Molina
Los acontecimientos de las últimas horas y meses incluso, han dado muestra del gran compromiso que la gobernadora Maru Campos tiene con la sociedad chihuahuense.
Maru ha mostrado mano dura en el combate a la delincuencia y sin temor a decirlo en la lucha contra el crimen organizado, que ha asolado a la entidad por décadas.
A tan solo un año de su administración es posible hacer un recuento del trabajo realizado para reestablecer la paz en la entidad y terminar de una buena vez con los generadores de violencia, como lo prometió desde su campaña.
Desde el abatimiento de “El Neto” en Ciudad Juárez, la limpia en los Ceresos estatales y el gran trabajo coordinado y conjunto con la Federación para capturar a “El chueco”, operativo permanente que permitió cercar al criminal y que dio como resultado su muerte en Sinaloa hace algunas unas horas, son ejemplo de que la gobernadora no se anda con miramientos, es una mujer fuerte, firme y contundente en sus decisiones.
Quienes conforman su gabinete lo saben. “Estamos para dar resultados, aquí no venimos a perder el tiempo”, lo dijo recientemente en una entrevista a los medios de comunicación cuando pidió la renuncia del secretario de Salud por las graves omisiones cometidas, justamente en la sierra tarahumara.
Bajo ninguna circunstancia vamos a permitir otro hecho criminal como este. Nunca más un criminal como “El chueco”, señaló el fiscal en rueda de prensa, claramente en respaldo a las instrucciones dadas por la mandataria estatal.
Desde los lamentables sucesos en los que fueron asesinados dos sacerdotes de la comunidad jesuita y dos personas más en Cerocahui, de inmediato se montó un operativo especial por instrucciones de la gobernadora, coordinado y supervisado por la Fiscalía General del Estado para dar con el paradero de José Noriel Portillo, alias “El chueco” a quien se le atribuyen estos y más crímenes de personas en la sierra de Chihuahua, para lo cual la coordinación entre los tres órdenes de Gobierno ha sido fundamental para regresar la paz a la zona serrana.
Es de reconocerse además el trabajo de la Fiscalía General del Estado, que siempre estuvo pendiente de la investigación y búsqueda del criminal.
Por lo que la muerte de “El chueco” viene a debilitar la actividad delictiva de su organización criminal, junto con las 35 personas que han sido detenidas en los operativos de búsqueda, así como el decomiso de armas, droga y desmantelamiento de laboratorios de metanfetaminas y fentanilo.
Confiamos en que ahora la comunidad de Cerocahui y la región de Urique, en particular, pueda vivir con mayor tranquilidad, que fue el objetivo trazado desde el inicio de la actual administración.
Este evento viene a fortalecer el compromiso de la gobernadora con los habitantes de la zona serrana y miembros de la Compañía de Jesús, de seguir trabajando para lograr y sostener un ambiente de paz y continuar combatiendo las profundas causas que generan la desigualdad y la violencia.