El Efecto Lucifer

Por: José Cruz Pérez Rucobo

Este consiste en analizar los motivos que llevan a una persona a actuar con maldad, sin contar con antecedentes para este tipo de conducta. Es decir, se han hecho experimentos con gente de un mismo estrato social-cultural, donde se les dan roles diferentes y estos tienden a actuar de acuerdo a esa arbitraria etiqueta. Hay dos películas con este mismo tema, una de ellas se llama precisamente “El efecto Lucifer” y la segunda “El experimento”. Ambas con una trama similar, en, El experimento, se trata de un hecho real. En la Universidad de Stanford de Palo Alto Cal. se eligieron 24 estudiantes sin antecedentes de violencia y al azar se les dio a 12 de ellos el rol de presos y a los 12 restantes el de carceleros. El convenio era pagarles a ambos grupos un sueldo de 15 Dólares diarios a cada uno de los participantes y su respectivo uniforme (reo o guardia), el experimento debería tener una duración de 2 semanas. Desde el segundo día empezaron los problemas, los carceleros se posesionaron de su papel y empezaron a actuar con crueldad y esta se fue incrementando con el paso de los días, llegando a suspenderse el experimento porque estaba en grave peligro la integridad física de los participantes. Las conclusiones a que se llegó, es que TODOS estamos expuestos a incrementar nuestro nivel de maldad y violencia, sólo falta que exista el detonante para entrar a la zona oscura que todos poseemos.

La política y el efecto Lucifer.- yo, en forma personal, llegué a otras conclusiones. En mi concepto, un detonante para sacar lo peor de un ser humano es el poder, ya sea: físico, intelectual, político o económico. La mayoría de las personas no está preparada para manejar el poder y aquellos amables compañeros de escuela o bien de trabajo que conocimos, pueden llegar a ser o transformarse en bestias sin sentimientos. Recurro a la frase conocida, “Si quieres conocer a alguien, dale poder”. El poder atonta a los inteligentes, a los ya tontos los vuelve locos. Cuantas veces nos ha pasado que le damos nuestro voto y confianza a quien parecía buena persona y resulta: abusivo, ladrón, cruel, sinvergüenza, embustero y si llega a degenerar, se vuelve criminal. Imagino que cada uno de los que lean este texto, tendrá una experiencia personal al respecto, sin embargo, ¿está usted preparado para manejar el poder? ¿Qué haría si un atolondrado partido político lo lleva a una senaduría o bien se saca la lotería? En sus posibles y diversas respuestas está la clave. Recomendación final, si es usted una persona íntegra, no busque el poder político, cambiaría su esencia, sé de lo que hablo, en mi experiencia conozco muchos casos así.

“La ignorancia es la madre de la maldad y de todos los demás vicios”

Galileo Galilei

“El poder es peligroso pero necesario. Su ausencia deriva en caos, su exceso en tiranía”

Jesús Silva Herzog