El Presidente argentino, Javier Milei, ha anunciado la prohibición del uso del lenguaje inclusivo y cualquier referencia a la perspectiva de género en los documentos de la administración pública. Esta medida marca un cambio significativo respecto a la práctica adoptada por el Gobierno del anterior Mandatario Alberto Fernández (2019-2023).
El portavoz presidencial, Manuel Adorni, informó que el Gobierno ha comenzado los trámites para poner fin a esta práctica. Durante su conferencia de prensa habitual, Adorni precisó que no se permitirá el uso de la letra e, la arroba, la x, ni la innecesaria inclusión del femenino en la documentación oficial.
Milei, quien se autodenomina como un “libertario anarcocapitalista”, ha abogado por “dar la batalla cultural” contra lo que él considera como el “adoctrinamiento del marxismo”, responsable, según él, de haber promovido el lenguaje inclusivo, la “ideología de género” y la “agenda ecologista”.
Adorni afirmó que el Gobierno no está dispuesto a entablar un debate sobre el uso del lenguaje y defendió que la gramática del idioma castellano representa a todos los sectores. La medida anunciada busca extender la decisión ya tomada por el Ministerio de Defensa en su documentación oficial.
Una orden emitida por el Ministro de Defensa, Luis Petri, establece que “deberá emplearse el idioma castellano” conforme a los términos y reglas establecidos por la Real Academia Española. En virtud de esta nueva normativa, términos como “sargenta” o “caba” no serán permitidos, así como tampoco términos para referirse a identidades no binarias como “soldadxs” o “soldades”.
Argentina fue pionera en la región en el uso de este lenguaje, el cual algunas universidades adoptaron desde 2017. El ex presidente Fernández lo utilizó en varias ocasiones públicamente, manifestando en una ocasión: “Vamos poquito a poquito haciendo posible lo que parecía imposible. El ideal va a ser cuando todos y todas seamos todes y a nadie le importe el sexo de la gente”.
En 2021, Fernández anunció la implementación del documento nacional de identidad para personas no binarias. El Gobierno de Milei ha generado controversia en los últimos días con otras medidas sociales, como el desmantelamiento del Instituto Nacional contra la Discriminación, considerado como un gasto innecesario.