Chihuahua.- Una movilización de unidades de la policía municipal se dirigió al panteón de Carrizalillo donde se efectuaba un funeral fuera de control.
El hecho se registró cuando integrantes de dos familias que daban su último adiós a un pariente comenzaron a discutir y se fueron hasta los empujones y golpes.
Uno de los deudos pidió la intervención de la policía cuando la riña se extendía y reportó al sistema de emergencias.
Policías municipales llegaron hasta el camposanto y calmaron los ánimos de los rijosos y restableciendo el orden sin que hubiera personas detenidas.
Tras asegurarse que todo volvía a la calma, el funeral prosiguió y los agentes volvieron a sus recorridos.
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