Columna Vía Libre
Todavía no se define quién será el candidato de MORENA para la presidencia municipal de Chihuahua y en ese escenario, solo hay dos posibles candidatos…Carlos Borruel y Marco Quezada.
Los dos tienen perfiles muy parecidos, ambos fueron ex alcaldes, sus carreras iniciaron casi al mismo tiempo, fueron diputados, secretarios de gobierno…en pocas palabras; tan malo el “pinto” como el “colorado”.
Serán los encargados de mover los hilos en MORENA los que decidirán en una “encuesta”, y evaluarán qué vale más; el tema del Aeroshow, o tener una familia escandalosa…
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Como toda la vida, Marco Quezada ha sido muy tibio para tomar decisiones, así se los hizo ver una vez más a su equipo de “empolvados políticos” la semana pasada cuando se juntaron en el “War Room”.
En dicha reunión, lo que más le preocupaba a Quezada era si les decían o no a “la perrada” que ya se iba a MORENA, se notaba muy preocupado de cómo le iban a decir a “juanita” en el grupo de whatsapp que tiene desde hace 10 años, que no puede buscar la gubernatura, que nomás le alcanza para la presidencia municipal -y eso quién sabe- y que va por MORENA.
Quezada le pidió a uno de sus allegados que buscara a líderes territoriales, sin embargo se le olvida que tienen 6 años que no se paran en las colonias, no sabe que ya les dieron baje con casi todos.
Todavía faltando horas para registrarse como precandidato en MORENA para presidente municipal de Chihuahua, Marco la estaba pensando…¿Y así quiere defender los colores e ideales de La 4T?
Si alguien en esta vida es anti-AMLO, es el chaparrito de Basúchil…Nomás tenía hasta ayer para registrarse, a ver si hoy asoma la cabeza para darlo a conocer.
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Carlos Borruel está tomando decisiones rápidas, sin pensarla tanto como su contrincante.
Así lo demostró el lunes pasado -hace 8 días- cuando estuvo en CDMX, les dijo a los que mueven los hilos que ya tenía a los amigos que le van a “meter” en la campaña.
Sin pensarla dos veces, se registró a las pocas horas de renunciar al PAN, y más cuando le llamó Marco Quezada para invitarlo a desayunar al día siguiente, conociendo cómo es el chaparrito, mejor le ganó el tirón en la registrada.
Pa’ pronto Borruel soltó en los medios que él era el precandidato, que ya se había registrado por internet y qué estaba a la orden…
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Haciendo unos pronósticos entre varios conocedores de la política, se coincidió en lo siguiente…recordemos que Maru Campos en el 2018 ganó con 203 mil votos en la capital, nomás que iba en coalición con Movimiento Ciudadano, o sea hay que restarle esos “pocos votos”.
Fernando Tiscareño obtuvo 110 mil, -números cerrados-, Alex Domínguez 50 mil, Marco Bonilla no llegará a los 200 mil, si acaso unos 150,00…aparte Riggs y -si es Borruel- se irán MUCHOS panistas con ellos -el pastel se reparte-, así que ni Carlos ni Marco obtendrán 55 mil votos y eso yéndonos muy arriba, incluso se dice que traes más seguidores Borruel, por eso se lanzó de volada y sin pensarla cuando le dijeron que si quería ser el candidato.
Ahora bien, son muchos los morenistas que están enojados con estas incorporaciones de políticos a última hora, sobre todo con la de Marco Quezada, ya veremos cómo avanzan esta semana estos dos políticos…
