Columna Vía Libre
Finalmente se registró Marco Quezada en MORENA para ser el candidato a la alcaldía de Chihuahua, y estuvo a punto de no hacerlo, debido a que las cosas se pusieron muy turbias en las oficinas de San Felipe a unas cuantas horas de que fuera el registro. En esas mesas de negociación se encontraban representantes de Ariadna Montiel y Juan Carlos Loera, estaban Martín Chaparro, El Yako, José Ramón Enriquez y el mismísimo Marco Adán.
En ese estira y afloja se dio la negociación para los Borruel, dándoles el distrito 08 para Mónica Borruel la hija del expresidente municipal de Chihuahua y, dejando en el abandono a Fernando Tiscareño quien había defendido los colores morenistas en la elección del 2018 y, quien deja un techo nada despreciable de 110 mil votos.
Quien también logro amarrar y muy bien sus posiciones fueron los “enemigos” de Quezada Martínez, nos referimos a la familia Aguilar, ya que amarraron pluri federal para una hija (Lilia), amarraron regiduría para otra hija y, para América, otra de las hijas va por tierra en el 17 local. Eso hizo que en algún momento Quezada Martínez hiciera berrinche y pusiera sobre la mesa no registrarse, pero gracias a ese berrinche, logró meterle mano a las regidurías, poniendo en las posiciones de los morenistas a nombres negociados por el mismo Fernando Tiscareño, los fundadores ganones fueron Yolanda Terrazas, Sergio González Rojo y Leticia Rascón.
Por lo que en ese sentido, Fernando Tiscareño se debe de dar por pagado, aunque en realidad ninguno de esos lo defiendan ni en una carne asada, por el contrario, se la pasan despotricando de El Tisca.
Ya por último, y para no retirarse del registro el chaparrito de Basúchil, rompió el acuerdo que tenía con Fermín Ordoñez quitando de las regidurías a Martín Enriquez y colocando al Marchista Olímpico Horacio Nava, quien en estos momento se encuentra en Europa preparándose para las olimpiadas y quien tendrá que hacer la campaña vía Zoom, porque por Chihuahua no regresa hasta pasados los juegos olímpicos.
Total que, tanto en las regidurías, como en las diputaciones locales, no hay verdadera representatividad de los morenos, puras marranadas han hecho en MORENA NOMÁS por el cochino dinero y el poder político.
Ya veremos si, sin ellos -los verdaderos morenos- logran superar las expectativas y ser un verdadero rival contra Marco Bonilla y los panistas dónde sí van verdaderos panistas como candidatos, no como en el PRIMOR que acaban de formar en MORENA.
Por cierto, donde también va perdiendo Quezada contra Bonilla, es en el tema del suplente, pues no se puede comparar NUNCA EN LA VIDA, Don Jorge Cruz Russek, un gran empresario de Chihuahua contra un chavito que integró Quezada para que le regale los desayunos en su restaurant, nos referimos a José Fajardo, dueño de El Gallito Mañanero.
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Víctor Quintana siempre le anda jugando al pendejo, poniendo su carita de víctima para conseguir las cosas, después de ser un traidor para MORENA -pero ya se les olvidó-, incluso para el mismo Andrés Manuel cuando anduvo rogándole a AMLO de manera directa que fuera candidato a gobernador en las pasadas elecciones -cuando Castrejón fue candidato a la presidencia municipal- y, cuando por fin le dijo que sí, se hizo el enfermo, ganó Javier Corral y se sintió muy bien que hasta secretario de Desarrollo Social fue con Corral.
Ahora lo premian al dejarlo como candidato de diputado por el Distrito 12, además Víctor y Lucha Castro habían puesto a Erika Mendoza García como Directora del INFORAJ, pues es gente de Lucha Castro y ahora operaron estos dos pillos para ponerla de candidata por el Distrito 18 por Movimiento Ciudadano, ayudada además por Gabino y Alma Gómez.
Víctor juega las canicas con Corral, Loera y con Maru, mientras Lucha Castro juega también con Corral, con Loera y con El Caballo Lozoya, y la muestra está que pusieron a Erika, donde le operan la candidatura Gabino y Alma Gómez, ya andan muy movidos en el Distrito 18.
Estos dos personajes están peor que agentes de la KGB, juegan como agentes triples, incluso hasta con el Algodón, y todavía premian a Quintana, era para que lo sacaran de MORENA por ojete, pero pues ahí sigue, dándoles atole con el dedo…
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Eloy García Tarín siempre fue un escudero de Marco Quezada, pero hay que recordar que desde que se acercó a Marco, siempre lo benefició teniéndolo cerca de su equipo, incluso incluyéndolo en la nómina con un buen puesto, hasta lo eligió de todo su gabinete e impulsó como diputado en el 2013, para que ganara el distrito más priísta de Chihuahua.
Eso le ocasionó a Quezada diferencias con muchos de su equipo, y más aún cuando ha sido el candidato priísta que ha ganado ese distrito por menos diferencia de votos.
Cuando dejó de ser diputado y que ni Marco ni Lucía le pudieron ofrecer un sueldo o un trabajo, en ese momento dejó de ser el mejor amigo de Quezada Martínez. Eloy vio una oportunidad con el Colectivo Ciudadano que se inventó Quezada para agarrar un puesto, pero se vino una pelea donde tuvieron diferencias Cabada y Quezada cuando el entonces alcalde de Juárez se dio cuenta que el chaparrito de Basúchil no pudo juntar ni a cien personas, discutieron de quién sería el coordinador general del Colectivo Ciudadano, obviamente Marco propuso a Heliodoro y Cabada a César Cabello, lo que fue el acabose para García Tarín quien estaba presente en esa discusión y al ver que Marco no lo defendió frente a sus amigos se encabronó.
Luego a Eloy le cayó del cielo la invitación para ser el dirigente de Redes sociales Progresistas, pero para su mala suerte, salió de la cárcel la Mtra. Elba Esther Gordillo y tumbó los nombramientos que se habían regalado, de tal manera que salieron de RSP García Tarín y Poncho Marquez, este ultimo se refugia coordinandole el activismo a Quezada, al cual se le ve como perrito regañado entre los marquistas.
Ahora Eloy se suma al equipo de Marco Bonilla, es extraño que lo acogiera, pues García Tarín no trae liderazgo, ni grupo político que aporte a la campaña de Bonilla, lo que sí trae, son muchos secretos de Marco Quezada.
