*Hay tiro con los de la fuente de Gobierno *La ASE levanta 25 expedientes *César Komaba

Vía Libre

El equipo de la Coordinación de Comunicación Social, de Maru Campos, liderado por la ex conductora de televisión, Adriana Ruíz, insiste en intervenir en el desempeño de la labor periodística, y es que las muchachas quieren tratar a la prensa como si fueran empleados de Gobierno del Estado, olvidándose de que los comunicadores trabajan para empresas privadas e independientes.

Son varias las ocasiones en que Adriana Ruíz ha llamado a los directivos de los periódicos, para poner quejas sobre los reporteros de la fuente, regularmente es porque los muchachos se quejan de la forma en que son tratados en los eventos o por el mutis que mantienen en los temas torales de la administración.

Pero también, se han presentado varias acciones que dejan mucho qué pensar sobre el profesionalismo de ese equipo y su capacidad para tratar las formas en que se informa a la ciudadanía sobre lo que se hace y se deja de hacer.

Tan sólo este jueves, durante la protesta de los chavos del SNM, Adriana Ruíz, acostumbrada a decir donde se pongan los reporteros en los eventos según su criterio, quitó a unos colegas que se encontraban a varios metros atrás del presídium, pues les comentó que no les gustaba que estuvieran ahí, porque salían de fondo en sus tomas, así que los retiró del lugar; en ese mismo evento, se evitó que los comunicadores intentaran aunque sea abordar a la gobernadora Maru Campos; posteriormente en el evento celebrado en las instalaciones de Vialidad, una asistente de Adriana, estuvo bloqueando en todo momento las tomas que intentaban hacer algunos reporteros en una entrevista banquetera, argumentando que ella estaba bien y que no le estorbaba a nadie.

Deberían de cuidar el trato a los comunicadores, porque poco a poco han ido calentando la fuente, y la bronca no tarda es explotar, y quien finalmente se verá afectada, será Maru Campos; por cierto, recuérdenle a la señora Ruíz y compañía, que los convenios los tienen con los dueños y no con los reporteros.

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La Auditoría Superior del Estado, puso en evidencia que fueron 25 los expedientes en contra de ex duartistas, a los que les dieron carpetazo durante la administración de Corral, pero ¿por qué lo hicieron, si la idea era ir contra los duartistas?

Pues dicen los que saben, que esos 25 expedientes que la ASE levantó por haber detectado transas en las cuentas públicas del 2016 y que posteriormente fueron turnados a la Secretaría de la Función Pública, corresponden a los ex funcionarios que, con tal de salvar el pellejo, echaron de cabeza a sus jefes, es decir, se armaron las acusaciones, les metieron miedo y cuando los doblegaron, les dieron carpetazo a sus asuntos.

Estos funcionarios corralistas que utilizaron esa artimaña, ahora deberán andarse con cuidado, porque la nueva Secretaría de la Función Pública, va tras ellos, por haber omitido las observaciones de la Auditoría Superior del Estado, lo que resultará muy seguramente, en la apertura de causas penales…el perseguidor salió perseguido.

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El director de la Policía Vial, César Komaba, OTRA VEZ!!! Se dejó llevar por el subconsciente, y es que cuando se le preguntó sobre las implicaciones que tendría para la corporación, la implementación de los protocolos antivioladores anunciados por Maru Campos, el funcionario dijo que eran protocolos muy latosos, milésima de segundo después, se percató del error y corrigió, diciendo que iban a ser tardados, pues a ver a hora de dónde sacan a tanta mujer policía para ellas sí puedan detener  las conductoras.

Nadie sabe por qué la insistencia de Maru Campos en mantener en la nómina a César Komaba, pues a cada rato lo traiciona el subconsciente, como cuando dijo que estaba contento de que las mujeres ya iban a tener que usar el cubrebocas para que se estuvieran calladas.

Por cierto, resulta irónico que César Komaba, quien siempre ha sido señalado como misógino y machista, sea quien encabeza la corporación que en las últimas semanas se popularizó a nivel nacional por tener dentro de sus filas a policías violadores.